Después de que la inflación alcanzara en diciembre un máximo de 40 años, el 7,9%, la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Jen Psaki, admitió en un comunicado. Dijo que los nuevos datos mensuales de inflación serán «extraordinariamente más altos«.
Psaki dijo en su habitual rueda de prensa:
«Esperamos que la inflación general del IPC de marzo sea extraordinariamente elevada debido a la subida de precios de [el presidente ruso Vladimir] Putin, y esperamos una gran diferencia entre la inflación subyacente y la general que refleje las perturbaciones mundiales en los mercados de la energía y los alimentos.»
Según el índice mensual de precios al consumo, el coste medio de los bienes y servicios aumentó un 7,9% en febrero en comparación con el mismo mes del año anterior. Dado que sólo cubrió los primeros cinco días de la invasión rusa de Ucrania, que comenzó el 24 de febrero, las cifras publicadas el martes ofrecerán una imagen más completa del impacto del conflicto europeo en los precios que las publicadas el lunes y el martes anteriores.
Debido a la elevada inflación, la Reserva Federal se ha visto obligada a intervenir con más firmeza y, como resultado, el banco central ha empezado a subir los tipos de interés y comenzará a drenar liquidez de la economía en las próximas semanas. Como consecuencia del endurecimiento de las condiciones monetarias, las expectativas de crecimiento se están revisando a la baja.
Las criptomonedas vienen al rescate
Los individuos se muestran cada vez más aprensivos sobre su futuro financiero como resultado de la insistencia del gobierno en plantear el tema de la inflación y los peligros relacionados con ella. La toma de decisiones será más severa y un mayor número de individuos buscará alternativas para asegurarse de que el valor de sus activos no disminuya.
Desde que se tiene memoria, las criptomonedas han sido consideradas como una forma segura de almacenar la riqueza en forma digital. Los individuos de países con altas tasas de inflación compran y guardan monedas más estables, como el dólar, o empiezan a comerciar con criptomonedas. A medida que el valor del dólar disminuye con el tiempo, la situación en Estados Unidos puede parecerse a la de los países con alta inflación.
Se espera que crezca la demanda de criptomonedas, lo que podría provocar un aumento de los precios de un espectro más amplio de activos digitales, incluidos el Bitcoin y otras criptomonedas. Por otra parte, el mercado se encuentra actualmente en una posición peligrosa. Es probable que los consumidores estén preocupados por invertir en bitcoin como resultado de la reciente caída de los precios de las criptomonedas.
Incluso en un país estable como Estados Unidos, un aumento de las tasas de inflación podría tener efectos desastrosos en las economías de los países vecinos. Muchos países tienen lazos diplomáticos con los Estados Unidos y, en particular, emplean el dólar estadounidense en sus operaciones financieras con los Estados Unidos de América. Existe la posibilidad de que la pérdida de dinero en esta zona tenga implicaciones de gran alcance. Las criptomonedas podrían lograr su objetivo final más rápidamente como resultado de esto.
