Telegram prometió al mundo una cadena de bloques de red descentralizada que ofrecería todas las cosas que ofrecen las cadenas de bloques emblemáticas, pero luego agregaría la característica más importante y diferenciadora de la privacidad total.
La promesa fue tan convincente que la compañía recaudó 1.7 mil millones de dólares en 2017 de inversores que estaban ansiosos por ver que se cumpliera la visión.
Sin embargo, esa visión ha sido arrojada al limbo ahora que un juez en Nueva York falló en contra de la emisión de tokens de Gram que debían entregarse a los inversores. Además, Telegram ahora tiene que devolver el dinero de los inversores.
El miércoles, el juez P. Kevin Castel, del Distrito Sur de Nueva York, dio la aclaración solicitada por Telegram sobre si aún podían emitir tokens Gram a inversores no estadounidenses.
El viernes, Telegram solicitó al Juez que aclarara su decisión de la semana pasada en la que se puso del lado de la SEC de EE. UU., Que afirmó que Telegram y TON Issuer habían vendido ilegalmente valores a inversores estadounidenses.
Con la esperanza de que esto solo afectara su acuerdo con los inversores estadounidenses, Telegram habría procedido con el proyecto sin las partes afectadas.
En su solicitud de aclaración, Telegram prometió alterar el acuerdo inicial para prohibir a sus titulares de Gram vender tokens Gram a inversores estadounidenses. También prometió implementar una puerta KYC para garantizar que los inversores estadounidenses se mantengan alejados de participar en la red TON.
Estas promesas no fueron lo suficientemente buenas como para convencer al juez de que continúe la venta de tokens.
“Centrarse en los Compradores iniciales y sus Acuerdos de compra de Gram pierde uno de los puntos centrales de la Opinión y la Orden del Tribunal, específicamente, que la ‘seguridad’ no era ni el Acuerdo de compra de Gram ni el Gram, sino todo el esquema que comprendía los Acuerdos de compra de Gram y los entendimientos y compromisos que acompañan a Telegram, incluida la expectativa e intención de que los Compradores Iniciales distribuyan Grams en un mercado público secundario «, dijo el juez el miércoles.
Además, el juez Castel respondió a la promesa de prohibir a los inversores estadounidenses acceder a la red y mantener tokens Gram diciendo que «TON Blockchain fue diseñado y está destinado a otorgar anonimato a quienes compran o venden Grams […] Telegram no muestra cómo la retención la billetera TON de usuarios estadounidenses autoinformados, que de otro modo son anónimos y simplemente podrían negarse a tener una dirección en los Estados Unidos, sería eficaz o exigible ”, dijo en su opinión y carta de pedido. «Por lo tanto, cualquier restricción sobre a quién un Comprador Inicial extranjero podría revender Grams sería dudoso de exigibilidad en el mundo real».
Telegram ha prometido entregar los tokens Gram a fines de abril después de haber vencido la fecha de entrega a partir de finales de octubre de 2019.
El creador del mensajero de privacidad le pidió a los inversores que votaran sobre el aplazamiento en octubre para darle tiempo para resolverlo.
Ahora que se ha dado la orden de devolver los fondos de los inversores, queda por ver cuál será el próximo movimiento de Telegram y qué tan pronto los inversores obtendrán su dinero (o parte del mismo). Sin olvidar que ahora, el desarrollo de la TON La red también está en peligro.
